Un mundo feliz
“El bien de
la humanidad debe consistir en que cada uno goce el máximo de la felicidad que
pueda, sin disminuir la felicidad de los demás.”
Aldous Huxley, novelista, filósofo y escritor de
origen británico, con una brillante trayectoria profesional que remonta desde
los veintidós años de edad, con su primer obra titulada, The Burning Wheel (1916) por medio de la cual demuestra
enfrentar la enfermedad que tenía en los ojos que le producía
opacidad en las córneas, misma que lo dejaría ciego por año y medio. Y a pesar de que esto lo encaminaría
a estudiar una carrera diferente de la
que pretendía en un inicio, fue caracterizado por hacerle frente a su problema con admirable optimismo y fortaleza a pesar de su corta edad, y a graduarse más tarde en Literatura Inglesa.
Tras
una larga trayectoria, sería dieciséis años
después cuando la obra Un mundo feliz
le daría lugar a la fama y distinción con la que actualmente es reconocido. Ya que es catalogada por muchos
como su mejor novela.
Es una novela futurista que describe un mundo mecanizado,
sometido y dirigido por el ambiente científico. En el que la sociedad es engendrada
artificialmente, permanece controlada y su vida condicionada a seguir las reglas
específicas que los encaminarán a vivir felizmente,
de acuerdo a lo que se les ha enseñado que es la felicidad.
Los individuos que lo integran son creados científicamente
para vivir sin sentimientos, sin la capacidad de pensar por sí mismos, conformándose
y aceptando lo que se había predestinado para ellos. La sociedad es dividida
por estratos o castas con características específicas, entre cada una (como apariencia física, inteligencia y demás)
separando a los seres considerados superiores de los inferiores. La creación de esos seres
predestinaba su integridad, educación moral e intelectual.
Comparado con la realidad actual, ese mundo feliz
está regido por una serie de normas o costumbres sociales completamente
contrarias a las que son aceptadas o correctas en la actualidad. En el libro
aparecen dos personajes que muestran con claridad la diferencia entre un mundo
y otro. Lenina representa el mundo feliz descrito por Huxley y ella como los
demás habitantes corresponde a las características de la sociedad. En la contraparte de
ese mundo está John un joven apartado de esa civilización con una filosofía y forma de actuar
diferente a la que es
dictaminada por los otros, siendo rechazado o mal visto por la sociedad que
integraba ese mundo.
La obra me hace pensar y reflexionar acerca de la actitud que los habitantes mantienen, analizando y comparándolo con lo que se vive actualmente.
En lo que se refiere a la aceptación de normas, costumbres o leyes sin ser
capaces de discernir entre lo que es justo de lo que no, o peor aún mantener
una actitud conformista e indiferente ante los problemas sociales que se
manifiestan con el día a día.
Con esa obra el escritor advierte de alguna manera lo que podría ser nuestra realidad social en el futuro, manejada y dirigida científica y tecnológicamente por una dictadura.
“Existe al menos un rincón del universo que con toda
seguridad puedes mejorar, y eres tú mismo.”
Aldous Huxley
2 comentarios:
Mi opinión sobre este libro es que en parte tiene mucha razón al decir que nuestra felicidad depende de los criterios, situaciones, reglas y normas con las que hemos crecido, ya que estas nos dicen cómo actuar y así mismo nos van diciendo que es lo que debemos de tener en la vida para poder ser felices. Lo cual me resulta muy interesante
Me pareció muy buena tu reseña, bueno y nos damos cuenta como estas historias que comenzaron estando en un libro poco a poco las vamos encontrando en nuestra realidad.
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